20 minutos de fútbol y empate en la fría noche capitalina
Millonarios salió a ganar desde el primer minuto. Rápidamente inclinó la cancha a su favor y ahogó al rival. A los 5 Perlaza ganó la banda, pasó hacia atrás para un Cortés que remató al borde del área, su disparo pegó en el defensa y pasó a escasos centímetros del vertical derecho. Tras el tiro de esquina, Vargas ganó arriba y los centrales brasileros sacaron el balón de la línea de gol. A los 16 la presión alta surgió efecto, Cortés ganó la banda y se metió al área, centró rastrero para Silva que pifió y no pudo conectar bien el balón, la esférica le quedó a Leo Castro que no dudo en rematar fuerte arriba, golazo del delantero Embajador. Millonarios era una tromba, pero raramente tras el gol bajó un cambio y dejó de llegar. Comenzó a hacer posesión sólo en el medio campo, no tenía profundidad y los creativos no aparecieron. El rival se aplomó en su cancha y apeló al juego defensivo y la salida rápida por las bandas. Esperó hasta el tiempo de adición para acercarse al arco de Montero y con poco iba a obtener frutos. Segundo minuto de añadido, Benítez lanzó el tiro de esquina, Azevedo llegó desde atrás y marcó. Flojísima marca de Larry que sólo vio al rival cuando ya estaba celebrando. Duro golpe antes del entretiempo.
La charla en el descanso funcionó, y por lo menos de entrada, vimos otra vez al Millonarios sofocante y lleno de fútbol. Los laterales salieron más y los creativos comenzaron a subir. Al 56 quizá la jugada más clara del segundo tiempo. Cataño sacó con un amague a dos rivales, entró al área chica y antes de rematar pasó a Castro, el delantero no conectó bien y el balón pasó rozando el palo. Un minuto después buena tocata entre Arias, Cortés, Giraldo y Silva, Finalmente el capitán pasó la línea defensiva, pero remató muy suave. Tras estos 15 minutos el equipo volvió a lo de antes, predecible y fácil de detener. Castro estaba muy solo arriba y no se volvió a llegar. Los cambios se demoraron y hasta el 76 y 82 ingresaron Valencia y Uribe para tratar de cambiar algo. El equipo mejoró con los cambios y se acercó un poco más. Cortés de media distancia lo intentó, pero falló. Vargas nuevamente de cabeza ganó arriba y una vez más el portero mandó al tiro de esquina. Final del encuentro con un frío empate en Bogotá.
Millonarios salió a jugar como ha jugado la Copa y tras el gol todo parecía controlado. Se asustó con el gol tempranero y en lugar de ir a buscar el segundo se refugió. El gol en el añadido fue un golpe que lo dejó mal. Sólo 20 minutos le duró el impulso del comienzo. Esta vez no hubo el fútbol de juegos pasados y desde el banco los cambios fueron demorados y casi que hombre por hombre. Empate que sabe a poco, pero que lo deja líder del grupo tras la primera ronda. Con dos partidos de visita tendrá que salir a recuperar lo perdido la noche de ayer. Ahora a pensar en Envigado y en el clásico capitalino.