Setenta años del inicio dorado

Vamos a ponerlo con ejemplos, imagine usted que a su equipo llegan en los años 60s, Pelé y Garrincha, que cada domingo en los 70s ve jugar con la camisa que adora a Cruyff y Kempes o en los 80s Platini y Maradona comparten vestuario en su amada institución.

Pues bien, algo muy similar pasó en Bogotá con Millonarios a comienzos del los 50s, cuando Adolfo Pedernera y Alfredo Di Stéfano se vistieron con la camiseta azul y se pasearon por el país derrochando fútbol y clase, dejando una estela de gloria imborrable.

Se cumplen siete décadas del arribo de estos genios del fútbol mundial a nuestro país y como no podría ser de forma diferente, a la institución más gloriosa que posee el balompié cafetero.

Pedernera era una súper estrella, parte fundamental de la “máquina» de River que cautivó a propios y extraños para quedar instalado eternamente en la retina del exigente aficionado argentino.

Encantado por el cariño y las excelentes condiciones económicas que brindaban los azules, el “maestro” vuelve al sur del continente y trae consigo a Nestor Raúl Rossi y un tal Alfredo Di Stéfano.

Fue el inicio del Ballet azul, el que fuera el mejor equipo del mundo durante la primera mitad de años años cincuenta.

El azul en la cima, porque ustedes y yo compartimos la pasión por un equipo grande, gigante, que no nació hace 30 años, que desde siempre estuvo vestido con finas galas y dio demostraciones mundiales de buen juego. Somos hinchas de Millonarios y estamos de fiesta, celebramos la llegada de los genios que nos dieron reconocimiento total en el planeta fútbol.