Aquellas Sudamericanas (Parte 2)

Escrito por @DARIOTOTO81

Todos tenemos un gran recuerdo del segundo semestre del 2012, la estrella colgada con orgullo y lágrimas en el pecho, tras 24 años, que en verdad parecieron siglos. Un desierto del que salimos de la mano de los muchachos dirigidos magistralmente por Hernán Torres.

En aquel semestre fuimos líderes durante absolutamente todo el torneo, la valla menos vencida, la mejor diferencia de gol y además, como si fuera poco, nos paseamos por Suramérica, derrochando clase y garra, subiendo la camisa azul hasta confundirla con el cielo del continente, en la Copa Sudamericana.

Recuerdo perfectamente al comentarista de FoxSport, en nuestro primer partido ante el Inti Gas Peruano, sorprendido al ver la cantidad de seguidos albiazules, decir: “Si Millonarios jugara en la Luna, allá iría esta gente, que fidelidad…”

La serie la resolvimos en Bogotá, con un contundente 3-0, con una pareja Wason-Cosme en un nivel descomunal.

Vino Guaraní y en uno de los mejores partidos de Mayer Andrés, aseguramos la serie desde el partido de ida con un 2-4 de visitante (el gol final de Robayo es de crack). El empate como locales nos instaló en octavos ante el Palmeiras.

El “verdao” nos sorprendió con 2 anotaciones en su estadio, pero supimos descontar y cuando estábamos cerca del empate, un error de Franco, puso el encuentro 3 a 1.

Pero en la capital, la cosa fue a otro precio, Lewis, de inmenso encuentro, Ganiza y Rentería nos pusieron en la siguiente fase.

No podemos pasar por alto lo conseguido a nivel grupal por el dt Torres, en su primer semestre, logró sacar la mejor versión de jugadores como Tancredi y Otálvaro, vimos a una defensa en un nivel superlativo y en general los engranajes del equipo funcionaban como hace mucho no teníamos la fortuna de ver.

El duelo ante Gremio, merece capítulo aparte. Llegamos al Nemesio tras ser derrotados por la mínima y al os 13 minutos perdíamos por un gol y Román Torres tenía que salir lesionado.

Lo intentamos por todos lados, sacamos el arsenal, pero el balón, rebelde, se negaba a inflar la red del arco defendido por Marcelo Grohe. Cuando no era error en defunción, salían los palos para ahogar el grito de los cerca de 40 mil espectadores que abarrotaron las graderías del Campín.

Tan sólo hasta el minuto 60, Wilberto Cosme, logra el 1er tanto, un balón que primero se estrella con el poste izquierdo del portero y recorre de manera exasperante la línea de gol, para por fin entrar en el arco norte y decretar el empate.

30 minutos para anotar 2 goles. Se puede.

Faltan 10 para la finalización, y Wason, (que semestre jugaste negro querido) de cabeza, pone a ganar a Millonarios, falta un gol, pero aún hay tiempo.

Restando 60 segundos para el pitazo final, Martínez es derribado dentro del área y el juez ecuatoriano, Carlos Vera, señala el punto penal.

Euforia total, acompañada de un nerviosismo que solo los enfermos de esta pasión podemos llegar a entender.

Confieso que no lo ví. Me puse de espaldas, cerré los ojos y esperé el grito o el insulto. La vida y la pierna derecha de Rentería quisieron que la euforia fuese el sonido en la 57 con 30.

Remontada histórica, en media hora le marcamos 3 goles a los dirigidos por Luxemburgo, capitaneados por el gigante Ze Roberto, que terminó en un acto bochornoso golpeando al juez central del compromiso.

Vino la semi ante Tigre, un empate sin goles en Argentina, donde se desperdiciaron múltiples ocasiones de gol, y un empate a 1 en Bogotá que castigo con extrema dureza la falta de eficacia en arco contrario.

Otra vez quedamos ad portas de jugar la final, pero se coronó la campaña con el título local.

Qué gran semestre nos dieron estos jugadores, hermosos recuerdos, sus gestas nunca serán olvidadas.

(Ver más: http://www.pasionalbiazul.com/aquellas-sudamericanas-parte-1/)

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