Duele más
Canta el Grupo Niche:
“Y es que duele mas y mucho mas
Y duele mas y mucho mas
Y duele mas y un poco mas
Cuando se ha vivido”
Escribir con guayabo y vacío en el alma es tan complejo y difícil como lo tiene que ser regresar a la casa después de haber madrugado a las 4:00 AM para llegar a la oficina y así poder lograr que el jefe lo dejara salir a la hora del almuerzo, para lograr entrar al Campin después de pagar la boleta más costosa del fútbol colombiano.
Guayabo saber que tienes al mejor equipo del semestre, el que más puntos hizo, el mejor local, el mejor visitante, el más goleador, el que menos goles recibió, etc… y hoy eso duele más.
Vacío al saber que tienes al director técnico colombiano que más alto ha llegado en la historia de los mundiales y sin lugar a dudas uno de los más preparados en todo el continente.
Tristeza al saber que tu hinchada superó todas la barreras que les colocaban cada semana: valores de boletería, horarios absurdos, arbitrajes asquerosos y una mano oscura que generaban los clubes que no pudieron tener un papel medio decente y se consuelan hoy siendo puesto 20 pero “menos mal Millonarios no pudo ser campeón”.
Frustración al saber que tuviste el mejor arquero de América y que antes de sus salida no logró salir campeón con el equipo que lo recibió y lo acompaño en su vitrina internacional.
Melancolía al saber que hiciste todas las cosas bien pero en 45 minutos perdiste el trabajo serio que habías hecho los 6 meses antes. Y lo peor es varios minutos de esos malditos 45 minutos, ibas ganando lo que te daba cupo a la final.
Dolor al saber que si eras campeón igualabas a tu rival en la cantidad de títulos que a la par de los otros llamados grandes como el vecino tuvieron una temporada de fracaso tras fracaso.
Duele. Duele mucho al haber vivido todo lo Pinto y su equipo nos dio este semestre y que cual final trágico de película de súper héroes, se desvaneció en cuestión de segundos.
Y seguirá doliendo, porque las heridas que se le hacen al corazón tardan en sanar.
Por: @rafaeltovar