Envigado 0 Millonarios 0. Tercer partido consecutivo sin gol de un equipo sin pegada.

Desde el pitazo inicial el Albiazul quiso imponer condiciones. Volvió a usar la banda izquierda como su principal arma y trató de jugar en largo con Herazo. Al minuto 8 un pase largo encontró al delantero que remató, pero el balón se fue al tiro de esquina. El partido entró en un letargo donde la posesión se dividía y no había un claro dominador. Vega como siempre tapaba todos los huecos y se hizo impasable. La desconexión entre defensa y ataque fue evidente y solo hasta el 33 se volvió a llegar. Misma formula, pase al vacío de Ruiz a Herazo, el 7 ganó en velocidad, pero s disparo salió desviado. Con un aburrido 0-0 se acabó el primer tiempo.

Guerra ingresó por Gómez para darle un aire a una olvidada banda derecha. Como es costumbre en las segundas etapas, el equipo salió a subir sus líneas y comenzó a ganar en campo rival. Al 55 contragolpe visitante, Silva llegó al borde del área, remató y su balón alcanzó a golpear en el defensor, lo que hizo que tomara un extraño y sorprendiera al arquero, balón al palo y rebote en la línea. Lastimosamente se entró en el mismo bache de siempre, mucha posesión pero poco volúmen de juego. Yuber entró por Ruiz, Sosa por Silva y Márquez por Herazo, pero como en partidos anteriores nada más pasó. El «Caballo» tuvo dos opciones de cabeza, pero siempre el balón se fue desviado. Los últimos 10 minutos el equipo tuvo un envion, intentó llegar al arco rival, sin lograr materializar ninguna llegada. 94 minutos y final del partido.

Misma historia del encuentro contra Bucaramanga y Pasto (excepto por el gol de Herazo). El equipo tiene posesión, toca y toca pero sin profundidad. Macka y Ruiz se ven nublados y sin ellos el equipo es estéril. Herazo las corre todas, pero poco lo dejan mano a mano. Los que entran no hacen diferencia alguna y cada de vez más se evidencia lo corta de esta nómina. No se sufre en defensa, pero es un milagro llegar al arco rival. 1 gol en 4 partidos evidencian el principal problema del equipo  Gamero sigue declarando que está tranquilo con el plantel y poco a poco sigue sellando la debacle del Millonarios.

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