Millonarios perdió dos puntos frente a un equipo chico

Si, leyó bien, Millonarios dejó escapar dos puntos de local frente a un equipo chico, y si, aunque este se llame Santa Fe en ningún momento jugó el partido de este jueves como si fuera un clásico de grandes, al contrario, la visita parecía un recién ascendido del Torneo Águila.Ya sea porque el contexto del partido lo puso en ventaja de manera tempranera, o porque así había planificado el juego, Santa Fe fue un equipo absolutamente marrullero y cobarde, pero esto nos es razón para que uno de los mejores equipos del torneo como lo ha sido Millonarios no pudiera revertir la situación y ganarle a uno de los coleros del torneo.

3 puntos de los últimos 12, son cifras que empiezan a alarmar a cualquiera, y es que Millonarios después del arranque de campeonato brillante que había tenido ha bajado considerablemente en su rendimiento y en el juego. Anoche fue una muestra clara de lo anteriormente dicho, en el equipo hay niveles individuales muy bajos como por ejemplo Matías de los Santos, quien en un error grosero perdió la pelota que terminó convirtiéndose en el gol de la visita. Desde ese momento obviamente el contexto del partido cambió, se desnaturalizó completamente, y es que el escenario ideal para Santa Fe se había presentado, de la mano del gol de Burbano llegaría todo el juego tramposo y miedoso que propuso el visitante.

Millonarios todo el partido fue el manejador del juego, pero muchas veces lo hizo de manera aparatosa e improductiva, y otras tantas sin eficacia. De esta manera con un Millonarios ansioso que quería pero no podía, y un Santa Fe miedoso que tenía un premio que no merecía terminó la primera parte.

Para el comienzo del segundo tiempo la tónica del juego no había cambiado, Millonarios quería llevar el ritmo del partido, pero siempre terminaba fallando el último pase, y la visita especulativa a la espera de un error nuestro para cobrar. A pesar de la falta de precisión de Millonarios el empate llegó más pronto de lo esperado, tras una incursión por banda derecha de Felipe Román y un «pase de la muerte», Fabián González Lasso empujó el balón para poner el marcador en tablas. Después del gol todos esperábamos que Millonarios terminara de llevarse por delante al rival, pero lastimosamente no fue así… Posterior al empate llegaron los peores momentos de el azul en el juego, perdimos la pelota, retrocedimos metros en el campo, y empezamos a pelear el partido más que a jugarlo.

La frutilla del postre que terminó de rematar 30 minutos finales horribles de Millonarios fueron el ingreso de Óscar Barreto y Carlos López al juego. Enteraron absolutamente perdidos, desconectados del juego, su aporte fue nulo, y por el contrario desde su llegada al campo de juego el equipo se vio mucho más liviano. De esta manera un gris Millonarios empató con uno de los coleros, un equipo chico.

Sin duda alguna queda preocupación en la hinchada por lo que se ha visto en los dos últimos juegos especialmente, las ausencias de algunos nombres importantes como lo son Juan David Pérez y Santiago Montoya se ha sentido, pero en estos casos el colectivo debe suplir las bajas de los ausentes. Hay que trabajar y corregir, en Millonarios hay buenos jugadores y un dt demasiado capacitado. Debemos retomar el camino de la victoria, volver a convertirla en un hábito, frente al Medellín hay que ganar.

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