Millonarios regaló los tres puntos ante un equipo que pelea el descenso
Millonarios perdió el clásico capitalino ante el colero del campeonato.
El azul fue apático, frío, no tuvo rebeldía, no mostró ganas de ganar, en resumen fue todo lo que no queremos ver. Perdió de manera increíble la oportunidad de volver a la punta de campeonato, y prolongó a casi dos años la cantidad de tiempo sin ganar un partido frente a Independiente Santa Fe.
Un solitario gol de Balanta le bastó al colero de la reclasificación para llevarse el partido. El equipo que peleará el descenso en el año 2020 con un poco de actitud, algo de intensidad, faltas sistemáticas y aplicación táctica nos hizo ver mal, nos anuló, consiguieron que durante 90 minutos no disparáramos ni una sola vez a la portería que defendió Leandro Castellanos.
Pero el papelón de anoche tiene más demérito azul, que virtud cardenal. Millonarios se mostró inoperante, nunca entendió el partido, desde el minuto inicial entró inconexo al campo brindándole todas las garantías a su rival.
Y esto es lo que más preocupa, algo que siempre ha mostrado el equipo de Pinto es actitud, jugando bien, regular, o mal, el fuego sagrado siempre ha estado, pero anoche no se vió eso, sacando a Duque y Arango, ninguno de los jugadores entendió lo que se estaba disputando, eran más de tres puntos, era el honor, la historia.
Si, Millonarios afortunadamente para nosotros ganó el clásico más importante de la historia, pero de eso no se puede vivir eternamente, la paternidad marcada con el vecino hay que revalidarla cada juego. Ya no más, es momento de volver a ganar los clásicos, tantos juegos sin victoria al rival de patio ya cansan, hay que volver a disputar estos partidos con la actitud y hambre que ameritan.
Jugador Alfredo Di Stéfano: Desierto.
Jugador Hernán Boyero: Millonarios como conjunto.
@JuanDaSanchezS